Acaba el verano...

El esperado verano llega a su fin, como todo.
Ha sido un verano difícil, de muchos altibajos, de recuerdos, de echar de menos a personas que ya no están... pero también he sabido disfrutar de las personas que están a mi lado.
He pasado momentos difíciles, la pérdida de Willy ha sido como un jarro de agua congelada, uno de los peores sabores de boca que he experimentado jamás, pero como siempre luchar por un sueño me sacará adelante.
Dar un cambio en mi vida y volver a tener la oportunidad de empezar las cosas y empezarlas bien, me da un empujoncito para seguir soñando.

A veces sientes que la vida te trata mal, pero luego te das cuenta que tienes motivos más que sufientes para vivirla.

Los recuerdos se sostienen en la memoria...

Resulta curioso el giro que dan las cosas de un momento a otro, cuando menos te lo esperas, o incluso esperándotelo, a mí personalmente me sorprende. Aparece gente en tu vida, desaparece... pero nunca lo hacen de tu memoria. Desearía ser capaz de olvidar aquello que quiero olvidar, porque a veces me hace daño recordar. He llegado a los límites de la desesperación, he hecho lo imposible por pasar página, he llegado a lo más bajo que una persona puede llegar... pero al final lo he conseguido... pasar página, porque olvidar no. Busqué algo en qué creer, un sueño por el que luchar, una meta que alcanzar... puse todas mis fuerzas en ello, tanto que por un tiempo creí conseguir mi objetivo, pero una vez terminó todo mi memoría seguía fresca. Aprendí que no hay que luchar para borrar los recuerdos, aunque sean malos, sino aprender a vivir con ellos.

El sueño crece y se hace GRANDE

Todo el invierno sosteniéndome en un mismo objetivo. Soñando y esperando para poder llevar a cabo lo que tanto deseo. El truco es muy sencillo... primero lo sueñas, luego lo proyectas en tu mente, luego te lo crees y luego... se hace cueste lo que cueste xD!!

Bueno, pues ya acabó el curso y yo sigo teniendo una montaña de papeles que aprenderme... siempre me pasa igual. Pero lo importante es que voy haciendo muchas cositas a la vez, no me gusta dedicarme por completo a una de ellas y dejar todo lo demás. Disfrutar del pueblo, del campo, del agua fresquita es algo que se agradece después de tanta ciudad impregnada de... de miles de cosas, ya sabéis.
Ahora a dedicarme a lo que me de la gana más o menos, porque siempre hay obligaciones, y a disfrutar de mi mejor amigo y de mi familia...

un último esfuerzo ¿valdrá la pena?

Pues estoy de exámenes y no hay tiempo para el blog, ni para muchas otras cosas, pero esto está acabando y después... después se va a cagar la perra (como dicen por aquí).

Tengo varios proyectos para este verano, lo tengo todo en mi cabeza perfectamente estructurado, pero me falta tiempo y no sé de dónde lo voy a sacar, ¿de algún sitio lo podré sacar? yo creo que sí.

En dos semanas a mucho tardar estoy manos a la obra y aquí, por supuesto, será donde vaya plasmando cada uno de mis movimientos.

Esta foto es de un curso que estoy tomando para poder hacer lo que luego quiero hacer.

Mi mayor ilusión...

Todo el que me conoce sabe de ella. Sabe que es una de las cosas más importantes de mi vida. Sabe que es mi ¨retiro dorado. Todo el que me conoce habrá tenido la oportunidad de estar allí. Muchos ya forman parte de alguna de las innumerables historias que guardan sus cuatro paredes...

Todo el que va allí repite, todo el mundo quiere poner su granito de arena en uno de mis mayores sueños. Un sueño construido desde la ilusión, desde la pasión, desde el amor... y también desde el coraje y la rabia.

Un sueño que nunca tiene fin, que sea como sea como me sienta siempre tengo motivos para seguir soñando, una meta que siempre voy ampliando, un proyecto que me hace no perder la esperanza nunca.

Sí, os hablo de ella. Villamadera, La Cabaña, Capa Azul, El retiro dorado, La casita, La choza... cada uno la llama como quiere, porque como es única y especial nunca habrá un nombre que la defina en todo su apogeo.

Seguimos aprendiendo...

He tropezado en la misma piedra numerosísimas veces, y he buscado y rebuscado el motivo de por qué cuando tengo la piedra delante hago como que no la veo y al final... al suelo!!
Varios motivos se me ocurren... y varias soluciones también.
Es una cuestión de actitud; esa manera tan pasional que tengo de vivir las cosas, esas ganas de compartir experiencias, esa necesidad de mostrarme tal y como soy, de compartir todo lo que para mí tiene un valor especial, demasiado pronto tal vez, son las que me llevan a vivir situaciones desagradables y duras.
Creo que he aprendido la lección, a base de palos no, lo siguiente. En temas de amistad he aprendido a no darlo todo a la primera de cambio, a ir con pies de plomo y no suponer nunca nada sin total certeza, a no dejarme llevar, a no creer en las palabras sino en las acciones... he aprendido muchas cosas...muchísimas... He cometido errores, siempre los cometo, pero intento aprender también de ellos. El problema es que todo el mundo no aprende de sus errores, incluso no quieren reconocer cuál es el error.
Sólo decir que toda experiencia te enseña algo, te da fuerza y sabiduría, y te ayuda a comprender el complicadísimo funcionamiento de caminar por esto a lo que llamamos vida, con sus momentos divertidos y sus momentos no tan divertidos, dolorosos. Pero lo importante es encontrar un motivo, una ilusión, un sueño por el que seguir adelante... porque como siempre digo... sabe dios lo que nos habrá de pasar todavía... esto acaba de empezar...